domingo, 16 de diciembre de 2012

EL PROCESO DE PARTO






Después de 9 meses de larga espera, por fin llega el momento ansiado. Pero, ¿cómo identificar si estás de parto?, ¿en qué momento debería ir al hospital? ... Vamos a explicar de forma general cada una de las fases o etapas del proceso de parto, que te ayudarán a llevarlas con tranquilidad al reconocerlas. 

El parto es un proceso dinámico que, como dijimos, cuenta con varias fases. Cada una de las fases tiene unas características diferentes y el ritmo y la duración de cada una varía de una mujer a otra. Fases:


1. PRÓDROMOS (o preparto). Antes de que comience el parto propiamente dicho, se pueden dar las contracciones de Braxton Hicks. Se trata de contracciones leves e irregulares que desaparecen al descansar o al cambiar de posición. No son contracciones de parto, pero van preparando el cuerpo de la futura madre para el mismo. Para algunas mujeres pasan desapercibidas. Esta etapa puede ser larga, y es muy diferente de una mujer a otra; incluso de un parto a otro en una misma mujer. Si la mujer duda de si está de parto o no, es que realmente no lo está.



2. COMIENZO DE PARTO. Se considera que el parto inicia cuando: tiene el cuello de útero borrado en un 50 %, 2-3 contracciones cada 10 minutos (dinámica uterina regular: regulares, intensas y frecuentes) y una dilatación de 3-4 cm del cuello de útero. Si no cumple estas condiciones no se considera que esté de parto; por lo tanto no estaría justificado el ingreso de la paciente. No es necesario que rompa la bolsa para que se inicie el parto; incluso puede darse el caso en el que el bebé nazca con la bolsa íntegra.
¿y si rompo aguas? En caso de romper la bolsa y que se trate de un líquido amniótico claro, no es necesario ir corriendo al hospital. Que la bolsa esté rota no implica que el parto haya comenzado; en este caso también debería ir acompañada de contracciones. Si el líquido es teñido debe acudir al hospital; vigilando los movimientos del bebé.



3. DILATACIÓN. La dilatación es el proceso de aumento del diámetro del cuello uterino necesario para que salga el cuerpo del bebé a través de él. La dilatación se mide en cm. Este periodo concluye cuando esta llega a los 10 cm.


4. EXPULSIVO. Según la “Guía de Atención al Parto Normal” dirigida a las familias, el expulsivo es la etapa que transcurre entre el momento en que se alcanza la dilatación completa (10 cm de dilatación) y el nacimiento del bebé y se subdivide en dos fases: pasiva y activa. 

Pasiva: En esta fase las contracciones uterinas hacen descender la cabeza del bebé a lo largo de la vagina sin sensación de pujo en la mujer. En las nulíparas podría alcanzar las 2 horas de duración y 1h o un poco más en caso de analgesia epidural en las multíparas.

Activa: Comienza cuando el bebé es visible, se producen contracciones de expulsivo o se percibe el deseo de pujo. A partir de este momento el pujo materno ayuda al descenso y permite el nacimiento del bebé. La duración normal en nulíparas sin epidural es de hasta una hora y de hasta dos horas con epidural. En multíparas la duración normal es de hasta una hora independientemente de que tengan o no analgesia epidural.

El parto no termina después de que nace el bebé, ¡aún tiene que salir la placenta! La salida de la placenta no es inmediata tras salir el recién nacido; se desprende después de que el cordón umbilical deje de latir (10-30 minutos aprox.). Es necesario destacar que los tiempos en todo el proceso de parto son variables de mujer a mujer y de parto a parto.





5. POSPARTO INMEDIATO. Lo más importante de esta etapa es colocar al bebé en el pecho de su madre,   piel con piel el máximo tiempo posible. Este hecho favorece el establecimiento de la lactancia materna y la impronta. Los profesionales deben ofertar un ambiente tranquilo e íntimo que permita que el vínculo madre e hijo se establezca.

El contacto con el bebé y la estimulación de los pezones, provocará en la madre una nueva descarga de oxitocina, necesaria para que se produzcan las contracciones que den lugar al alumbramiento de la placenta y se minimizan así los riesgos de un sangrado posparto excesivo, que ponga en peligro la salud de la mujer recién parida.




Lidia.

0 comentarios:

Publicar un comentario